Julio Ulloa, principal artesano del jamón en Tarija, tiene un sueño. Él quiere que esa delicia europea tenga consumo masivo.
Ulloa, produce cada año unas 450 a 500 piernas de jamón que son comercializadas en hoteles o restaurantes de La Paz y Santa Cruz, como Los Tajibos, Le Suise, el Candelabro, el Viena, Hotel Europa o La Gitana. Pero, lejos está de satisfacer la demanda.
La receta del jamón, que hasta hace poco más de una década, era el secreto mejor guardado de algunas familias chapacas, se extendió gracias a la Universidad a una feria anual del jamón. Ahora, en Tarija hay una asociación APROJAT de jamoneros que produce unas 1.000 piezas anuales.
El benigno clima tarijeño, a decir de Ulloa, es el principal aliado de los jamoneros, y tal vez el único, puesto que las carencias del sector son muchas.
Por ejemplo, los cerdos son llevados desde Santa Cruz porque no hay quien los críe en Tarija; la infraestructura es aún artesanal, aunque eso también resulta un atractivo; y el Estado todavía no impulsa la actividad.
Pero, la historia de Ulloa es una muestra de que el negocio puede crecer. En medio de una sala donde cuelgan decenas de piernas de jamón, cuenta que su gusto por este manjar surgió porque una hermana de su padre se casó con un decendiente de italianos, en cuya casa se disfrutaba de jamones, aceitunas y quesos.
Finalmente, un curso en la Universidad reveló la receta y Ulloa empezó a producir jamón. Ahora, cuenta con dos primeros premios en la feria del jamón de Tarija.
Su sueño es poder criar cerdos alimentados con el desperdicio de la castaña.
La receta del jamón, que hasta hace poco más de una década, era el secreto mejor guardado de algunas familias chapacas, se extendió gracias a la Universidad a una feria anual del jamón. Ahora, en Tarija hay una asociación APROJAT de jamoneros que produce unas 1.000 piezas anuales.
El benigno clima tarijeño, a decir de Ulloa, es el principal aliado de los jamoneros, y tal vez el único, puesto que las carencias del sector son muchas.
Por ejemplo, los cerdos son llevados desde Santa Cruz porque no hay quien los críe en Tarija; la infraestructura es aún artesanal, aunque eso también resulta un atractivo; y el Estado todavía no impulsa la actividad.
Pero, la historia de Ulloa es una muestra de que el negocio puede crecer. En medio de una sala donde cuelgan decenas de piernas de jamón, cuenta que su gusto por este manjar surgió porque una hermana de su padre se casó con un decendiente de italianos, en cuya casa se disfrutaba de jamones, aceitunas y quesos.
Finalmente, un curso en la Universidad reveló la receta y Ulloa empezó a producir jamón. Ahora, cuenta con dos primeros premios en la feria del jamón de Tarija.
Su sueño es poder criar cerdos alimentados con el desperdicio de la castaña.
Sobre el Festival del JAMON:
La APROJAT invita a pequeños y medianos productores de todo Bolivia que elaboren jamones a nivel artesanal en las categorías de Jamones Curados Tipo Serranos Naturales y Jamones Curados Tipo Serranos Ahumados a sumarse a este evento gourmet.
El Festival Jamón Curado Tarija 2012, será una muestra de la producción artesanal de jamón tarijeño y los asistentes podrán degustar además del jamón, quesos y los vinos de las diez bodegas tarijeñas que estarán presentes apoyando el evento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario